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Acto: 1 Bailada: No Funciones dramatico-musicales: Tema de la canción: Bucólico pastoril Texto de la canción:
Los montes, que el pie se lavan
en los cristales del Tejo
cuando las frentes se miran
en los zafiros del cielo,
tiranizados tenía
un cerdoso animal fiero,
temor del campo y ruina
de venablos y de perros.
Acotaciones:
Vanse, y sale el Duque de Arjona vistiéndose, y Mendo, criado, y músicos.
Métrica: Romance
Composición poética o musical aludida: Sí
Personajes:
Músicos [Músicos]
Instrumentos:
[Sin instrumentos]
Comentario:
Escena diurna, interior. La canción coincide con la primera aparición del personaje principal de la comedia, el Duque de Arjona, privado del rey Juan II. Su letra es fragmento de un romance gongorino de tema venatorio. Aquí, la canción parece referirse metafóricamente al Duque, y lo introduce a los espectadores como un hombre "fiero", significando quizás que es poderoso y está bien asentado en la corte. El resto de la comedia demostrará que el Duque no es, en realidad, "fiero", sino noble y generoso. Al ser injustamente "perseguido" (como reza el título) por el conde de Santorcaz, el Duque se convierte en presa, igual que el jabalí del romance gongorino.
Acto: 3 Bailada: No Funciones dramatico-musicales: Tema de la canción: Destino Texto de la canción:
Escollo armado de yedra,
yo te conocí edificio,
ejemplo de lo que acaba
la carrera de los siglos.
De lo que fuiste primero
estás tan desconocido,
que de ti mismo olvidado
no te acuerdas de ti mismo.
Nadie se escapa del tiempo
que, aunque tarde a los principios,
como hay para tristes muerte,
hay para piedras castigo.
Acotaciones:
Retiran al Conde, y vanse todos, y sale el Duque en la prisión, escuchando una voz.
Métrica: Romance
Composición poética o musical aludida: Sí
Personajes:
1 x Voz [Cantante]
Instrumentos:
[Sin instrumentos]
Comentario:
Escena nocturna, en una prisión. El Duque de Arjona ha sido aprisionado por culpa de rumores falsos que le atribuyen varias violaciones en la ciudad de Burgos. El verdadero asaltador es el Conde de Santorcaz, quien acaba de ser descubierto por Álvaro de Luna y el rey Juan II. Sin saber que la fortuna está a punto de sonreírle de nuevo, el Duque permanece en la prisión, y escucha canción perfectamente acorde con su estado, ya que trata de un edificio que ahora está convertido en ruinas. La letra cantada aparece en comedias de Pedro Calderón de la Barca, y seguramente proviene de un romance que no hemos podido identificar.
VÉLEZ DE GUEVARA, Luis: El privado perseguido, Alicante, Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, 2010.
STEIN, Louise K.: Songs of Mortals, Dialogues of the Gods. Music and theatre in seventeenth-century Spain, Oxford, Clarendon Press, 1993.
PEDRELL, Felipe: Teatro lírico español anterior al siglo XIX, La Coruña, Canuto Berea, 1897, vol. III.
VALDIVIA, Francisco Alfonso: Guitarra, sistemas de notación y cultura popular. Los sistemas de notación abreviada de acordes y la popularización de la guitarra en España durante el siglo XVII, Universidad de Málaga, 2011 [tesis doctoral].
Investigadores que han trabajado en este registro: