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Título principal: El divino NarcisoGénero: AutoCantada: No
  • [Este registro no dispone de variantes de títulos]

1

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Alabanza a la belleza
Texto de la canción:

SINAGOGA
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

[…]

¡Alabad al Señor todos los hombres!

GENTILIDAD
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

[…]

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

SINAGOGA
¡Alabad

GENTILIDAD
aplaudid,

SINAGOGA
con himnos,

GENTILIDAD
con voces,

SINAGOGA
al Señor

GENTILIDAD
a Narciso,

SINAGOGA
todos los hombres,

GENTILIDAD
fuentes y flores!

[…]

SINAGOGA
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

GENTILIDAD
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

[…]

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

[…]

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

[…]

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

[…]

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

[…]

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

[…]

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

[…]

CORO 1
¡Alabad al Señor todos los hombres!

CORO 2
¡Aplaudid a Narciso, fuentes y flores!

Acotaciones:

  • Salen, por una parte, la GENTILIDAD, de ninfa, con acompañamiento de NINFAS y PASTORES; y por otra, la SINAGOGA, también de ninfa, con su acompañamiento, que serán los MÚSICOS; y detrás, muy bizarra, la NATURALEZA HUMANA, oyendo lo que cantan.
  • Pónese la NATURALEZA HUMANA entre los dos COROS.

Métrica: Pareados

Composición poética o musical aludida: No

Personajes:

  • 1 x Sinagoga [Alegoría]
  • 1 x Gentilidad [Alegoría]
  • Coro 1 [Músicos]
  • Coro 2 [Músicos]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

En esta primera escena del auto, la SINAGOGA y la GENTILIDAD cantan, respectivamente, las alabanzas de Dios y de Narciso. La NATURALEZA HUMANA presencia su canto y las interpela, en calidad de “Madre de entrambas”, para significarles que solo la SINAGOGA dice verdades, pero que las palabras de la GENTILIDAD, si son interpretadas alegóricamente, pueden contribuir a la transmisión de esas verdades. El pasaje es un intento de justificación de la interpretación cristiana del mito de Narciso, a través de la temática común de la Beldad, a la vez que una reflexión metatextual sobre el género mismo del auto sacramental.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

2

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Devoto
Texto de la canción:

ABEL
¡Poderoso Dios
de piedad inmensa,
esta ofrenda humilde
de mi mano acepta!

[…]

ENOC
¡Criador poderoso
del cielo y la tierra,
sólo a ti por Dios
confiesa mi lengua!

[…]

ÁNGEL
¡Para herir al niño
la mano no extiendas,
que basta haber visto
cuánto al Señor temas!

[…]

MOISÉS
¡O perdone al pueblo,
Señor, Tu clemencia,
o bórreme a mí
de la vida eterna!

[…]

CORO 1
¡Abrid, claros cielos
vuestras altas puertas,
y las densas nubes
al justo nos lluevan!

[…]

CORO 2
¡Ábranse las bocas
de la dura tierra,
y brote, cual fruto,
el Salvador de ella!

Acotaciones:

  • Ábrese el carro segundo; y va dando vuelta, en elevación, ABEL, encendiendo la lumbre; y encúbrese, en cantando.
  • Pasa de la misma manera ENOC, de rodillas, puestas las manos, y canta.
  • Pasa ABRAHAM, como lo pintan, y canta el ÁNGEL.
  • Pasa MOISÉS, con las tablas de la ley, y canta.

Métrica: Cuartetas

Composición poética o musical aludida:

Personajes:

  • 1 x Abel [Patriarca]
  • 1 x Enoc [Patriarca]
  • 1 x Moisés [Patriarca]
  • 1 x Ángel [Ángel]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

El Demonio, encarnado en la ninfa ECO, explica al AMOR PROPIO y a la SOBERBIA cómo el hombre siempre ha intentado que Dios lo perdone por sus pecados. Durante su explicación aparecen en escena, a título de ejemplo, algunos personajes bíblicos piadosos: ABEL, ENOC, ABRAHAM y MOISÉS. Todos cantan a Dios (con la excepción de ABRAHAM, que permanece en silencio mientras un ÁNGEL canta en su lugar) con palabras acordes a sus historias individuales. Al final del pasaje cantado intervienen dos COROS que interpelan al Dios de los Cielos y al Salvador de la Tierra, es decir, a Cristo.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

3

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Devoto
Texto de la canción:

ECO
Bellísimo Narciso,
que a estos humanos valles,
del monte de tus glorias
las celsitudes traes:
mis pesares escucha,
indignos de escucharse,
pues ni aun en esto esperan
alivio mis pesares.
Eco soy, la más rica
Pastora de estos valles;
bella decir pudieran
mis infelicidades.
Mas desde que severo
mi beldad despreciaste,
las que canté hermosuras
ya las lloro fealdades.
Pues tú mejor conoces
que los claros imanes
de tus ojos arrastran
todas las voluntades,
no extrañarás el ver
que yo venga a buscarte,
pues todo el mundo adora
tus prendas celestiales.
Y así, vengo a decirte
que ya que no es bastante
a ablandar tu dureza
mi nobleza y mis partes,
siquiera por ti mismo
mires interesable
mis riquezas, atento
a tus comodidades.
Pagarte intento, pues
no será disonante
el que venga a ofrecerte
la que viene a rogarte.
Y pues el interés
es en todas edades
quien del amor aviva
las viras penetrantes,
tiende la vista a cuanto
alcanza a divisarse
desde este monte excelso
que es injuria de atlante.
Mira aquestos ganados
que, inundando los valles,
de los prados fecundos
las esmeraldas pacen.
Mira en cándidos copos
la leche, que al cuajarse,
afrenta los jazmines
de la Aurora que nace.
Mira, de espigas rojas,
en los campos formarse
pajizos chamelotes
a las olas del aire.
Mira de esas montañas
los ricos minerales,
cuya preñez es oro,
rubíes y diamantes.
Mira, en el mar soberbio,
en conchas congelarse
el llanto de la aurora
en perlas orientales.
Mira de esos jardines
los fecundos frutales
de especies diferentes
dar frutos admirables.
Mira con verdes pinos
los montes coronarse:
con árboles que intentan
del cielo ser gigantes.
Escucha la armonía
de las canoras aves
que en coros diferentes
forman dulces discantes.
Mira de uno a otro polo
los reinos dilatarse,
dividiendo regiones
los brazos de los mares,
y mira cómo surcan
de las veleras naves
las ambiciosas proas
sus cerúleos cristales.
Mira entre aquellas grutas
diversos animales:
a unos, salir feroces,
a otros, huir cobardes.
Todo, bello Narciso,
sujeto a mi dictamen,
son posesiones mías,
son mis bienes dotales.
Y todo será tuyo,
si tú, con pecho afable
depones lo severo
y llegas a adorarme.

NARCISO
Aborrecida Ninfa,
no tu ambición te engañe,
que mi belleza sola
es digna de adorarse.
Vete de mi presencia
al polo más distante,
adonde siempre penes,
adonde nunca acabes.

ECO
Ya me voy, pero advierte
que, desde aquí adelante,
con declarados odios
tengo de procurarte
la muerte, para ver
si mi pena implacable
muere con que tú mueras,
o acabe con que acabes.

Acotaciones:

  • Acaba de subir ECO, y dice cantando en tono recitativo.

Métrica: Romance

Composición poética o musical aludida:

Personajes:

  • 1 x Eco [Ninfa]
  • 1 x Narciso [Pastor]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

En un pasaje cantado que ocupa la casi totalidad del cuadro segundo del auto, la ninfa ECO, trasunto del demonio, busca tentar a NARCISO cuando este se encuentra en lo alto de un monte, pero fracasa en su intento. Es clara la referencia a la tentación de Jesús en el desierto (Mateo 4:1 – 11 y Lucas 4:1 – 13). De hecho, unos versos antes, la propia ninfa ECO había explicitado la metáfora: “y en la elevada eminencia / de esta montaña Se oculta, / acompañado de fieras, / tan olvidado de Sí / que ha que no come cuarenta / días […]”.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Bassa, José

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

4

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Devoto
Texto de la canción:

GRACIA
Albricias, mundo; albricias,
Naturaleza Humana,
pues con dar esos pasos
te acercas a la Gracia:
¡Dichosa el alma
que merece tenerme en su morada!

Venturosa es mil veces
quien me ve tan cercana;
que está muy cerca el sol
cuando parece el alba:
¡Dichosa el alma
que merece hospedarme en su morada!


CORO
¡Dichosa el alma
que merece hospedarme en su morada!


GRACIA y NATURALEZA HUMANA
Albricias, Mundo; albricias,
Naturaleza Humana,
pues con dar esos pasos
te acercas a la Gracia:

CORO
¡Dichosa el alma
que merece tenerme en su morada!

Acotaciones:

  • Sale la GRACIA, de Pastora, cantando; y vanse acercando.
  • Repite la Música este último verso, y llégase la NATURALEZA a ella.

Métrica: Cuartetas con estribillo

Composición poética o musical aludida:

Personajes:

  • 1 x Gracia [Pastora]
  • 1 x Naturaleza Humana [Pastora]
  • Coro [Músicos]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

Escena diurna, en el bosque. La NATURALEZA HUMANA busca al pastor NARCISO para reconciliarse con él. Por el camino, se encuentra con la pastora GRACIA. La letra de la canción otorga un sentido metafórico al andar de la Naturaleza Humana: sus “pasos” son físicos, pero también morales en tanto que predisponen a la recepción de la gracia divina.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

5

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Diálogo con la naturaleza
Texto de la canción:

GRACIA
¡Oh, siempre cristalina,
clara y hermosa fuente:
tente, tente;
reparen mi rüina
tus ondas presurosas,
claras, limpias, vivíficas, lustrosas!

NATURALEZA HUMANA
No vayas tan ligera
en tu corriente clara;
para, para,
mis lágrimas espera:
vayan con tu corriente
santa, pura, clarísima, luciente.

GRACIA
¡Fuente de perfecciones,
de todas la más buena,
llena, llena
de méritos y dones,
a quien nunca ha llegado,
mácula, riesgo, sombra ni pecado!

NATURALEZA HUMANA
Serpiente ponzoñosa
no llega a tus espejos:
lejos, lejos
de tu corriente hermosa,
su ponzoña revienta;
tú corres limpia, preservada, exenta.

GRACIA
Bestia obscena, ni fiera,
no llega a tus cristales;
tales, tales
son, y de tal manera,
que dan con su dulzura
fortaleza y salud, gusto y ventura.

NATURALEZA HUMANA
Mi imagen representa
si Narciso repara,
clara, clara;
porque al mirarla sienta
del amor los efectos,
ansias, deseos, lágrimas y afectos.

Acotaciones:

  • Canta la GRACIA.

Métrica: Quintetos-Lira

Composición poética o musical aludida: No

Personajes:

  • 1 x Gracia [Pastora]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

La pastora GRACIA le indica a la NATURALEZA HUMANA que se acerque a una fuente para encontrar, en su reflejo, a NARCISO-Cristo. La fuente no es otra que la Fuente Sellada de los Cantares (4: 12), símbolo de pureza y, por lo tanto, de la Virgen María. A través de su canto, la GRACIA y la NATURALEZA HUMANA invocan a la Fuente intercesora.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

6

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Diálogo con la naturaleza
Texto de la canción:

NARCISO
Ovejuela perdida,
de tu dueño olvidada,
¿adónde vas errada?
Mira que dividida

(Canta)
de mí, también te apartas de tu vida.

Por las cisternas viejas
bebiendo turbias aguas,
tu necia sed enjuagas;
y con sordas orejas,

(Canta)
de las aguas vivíficas te alejas.

En mis finezas piensa:
verás que, siempre amante,
te guardo vigilante,
te libro de la ofensa,

(Canta)
y que pongo la vida en tu defensa.

De la escarcha y la nieve
cubierto, voy siguiendo
tus necios pasos, viendo
que ingrata no te mueve

(Canta)
ver que dejo por ti noventa y nueve.

Mira que mi hermosura
de todas es amada,
de todas es buscada,
sin reservar criatura,

(Canta)
y sólo a ti te elige tu ventura.

Por sendas horrorosas
tus pasos voy siguiendo,
y mis plantas hiriendo
de espinas dolorosas

(Canta)
que estas selvas producen, escabrosas.

Yo tengo de buscarte;
y aunque tema perdida,
por buscarte, la vida,
no tengo de dejarte,

(Canta)
que antes quiero perderla por hallarte.

¿Así me correspondes,
necia, de juicio errado?
¿No soy quien te ha crïado?
¿Cómo no me respondes,

(Canta)
y (como si pudieras) te me escondes?

Pregunta a tus mayores
los beneficios míos:
los abundantes ríos,
los pastos y verdores,

(Canta)
en que te apacentaron mis amores.

En un campo de abrojos,
en tierra no habitada,
te hallé sola, arriesgada
del lobo a ser despojos,

(Canta)
y te guardé cual niña de mis ojos.

Trájete a la verdura
del más ameno prado,
donde te ha apacentado
de la miel la dulzura,

(Canta)
y aceite que manó de peña dura.

Del trigo generoso
la médula escogida
te sustentó la vida,
hecho manjar sabroso,

(Canta)
y el licor de las uvas oloroso.

Engordaste, y lozana,
soberbia y engreída
de verte tan lucida,
altivamente vana,

(Canta)
Mi belleza olvidaste soberana.

Buscaste otros pastores
a quien no conocieron
tus padres, ni los vieron
ni honraron tus mayores;

(Canta)
y con esto incitaste mis furores.

Y prorrumpí enojado:
Yo esconderé mi cara
(a cuyas luces para
su cara el sol dorado)

(Canta)
de este ingrato, perverso, infiel ganado.

Yo haré que mis furores
los campos les abrasen
y las hierbas que pacen;
y talen mis ardores

(Canta)
aun los montes que son más superiores.

Mis saetas ligeras
les tiraré, y el hambre
corte el vital estambre;
y de aves carniceras

(Canta)
serán mordidos, y de bestias fieras.

Probarán los furores
de arrastradas serpientes;
y en muertes diferentes
obrará, en mis rigores,

(Canta)
fuera, el cuchillo; y dentro, los temores.

Mira que soberano
soy, y que no hay más fuerte;
que yo doy vida y muerte,
que yo hiero y yo sano,

(Canta)
y que nadie se escapa de mi mano.

Pero la sed ardiente
me aflige y me fatiga
bien es que el curso siga
de aquella clara fuente,

(Canta)
y que en ella templar mi ardor intente.

Que pues por ti he pasado
la hambre de gozarte,
no es mucho que mostrarte
procure mi cuidado,

(Canta)
que de la sed por ti estoy abrasado.

Acotaciones:

  • Llegan las dos a la Fuente; pónese la Naturaleza entre las ramas, y con ella la Gracia, de manera que parezca que se miran; y sale por otra parte Narciso, con una honda, como Pastor, y canta el último verso de [cada una de] las Coplas, y lo demás representa.

Métrica: Redondillas

Composición poética o musical aludida:

Personajes:

  • 1 x Narciso [Pastor]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

En un bosque, en las proximidades de la Fuente Sellada, Narciso recita y canta su amor por la Naturaleza Humana, sin saber que esta se encuentra allí mismo, escondida entre unas ramas, acompañada por la Gracia. A partir de la estrofa 13, el pastor recuerda las ofensas pasadas de la Naturaleza Humana, y su furia se desata, en lo que parece una alusión al Dios violento y vengativo del Antiguo Testamento. La ira también tiene una función dramática, ya que justifica el subsecuente acercamiento de Narciso a la Fuente, para “templar [su] ardor”.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

7

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Amoroso
Texto de la canción:

Tengo…
[…]
Pena…
[…]
Rabia
[…]
Tengo pena, rabia…
[…]
De ver…
[…]
Que…
[…]
Narciso…
[…]
De ver que Narciso…
[…]
Aún…
[…]
Ser…
[…]
Quebradizo…
[…]
A un ser quebradizo…
[…]
Quiere…
[...]
A mí…
[…]
Me agravia…
[…]
Quiere, a mí me agravia.
[…]
Tengo pena, rabia
de ver que Narciso
a un ser quebradizo
quiere, a mí me agravia.
[…]
Tormento…
[…]
Paso…
[…]
Insufrible
[…]
Tormento paso insufrible…
[…]
Pues…
[…]
Mi hermosura…
[…]
Cabal
[…]
Pues mi hermosura cabal…
[…]
El Amor…
[…]
Hizo…
[…]
Mortal…
[…]
El amor hizo mortal…
[…]
Sujeta…
[…]
Humana…
[…]
Pasible…
[…]
Sujeta, humana, pasible…
[…]
Tormento paso insufrible,
pues mi hermosura cabal
el amor hizo mortal,
sujeta, humana, pasible.
[…]
El Amor…
[…]
Que puede…
[…]
Herir…
[…]
El Amor, que puede herir…
[…]
En mí…
[…]
Mostró…
[…]
Su pujanza…
[…]
En mí mostró su pujanza…
[…]
Y amando…
[…]
A mí…
[….]
Semejanza…
[….]
Y amando a mi semejanza…
[…]
Del cielo…
[…]
Vine…
[…]
A morir…
[…]
Del cielo vine a morir…
[...]
El amor, que puede herir,
en mí mostró su pujanza;
y amando a mi semejanza
del cielo vine a morir.
[…]
Eco…
[…]
Quejosa…
[…]
Responde…
[…]
Eco quejosa responde…
[…]
Viendo…
[…]
Que quiera…
[….]
Tu amor…
[…]
Viendo que quiera tu amor…
[…]
Eco
Amar…
[…]
Un ser…
[…]
Inferior…
[…]
Amar un ser inferior…
[…]
Y así…
[…]
A tus ojos…
[…]
Se esconde
[…]
Y así a tus ojos se esconde…
[…]
Eco quejosa responde,
viendo que quiera tu amor
amar un ser inferior;
y así a tus ojos se esconde.

Acotaciones:

  • Dentro, repite la MÚSICA, con tono triste, los ecos.
  • Repite la MÚSICA toda la copla.

Métrica: Redondillas

Composición poética o musical aludida:

Personajes:

  • Música [Músicos]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

Ante el inminente encuentro de NARCISO y la NATURALEZA HUMANA, la ninfa ECO es presa de un ataque de celos. La SOBERBIA y el AMOR PROPIO le preguntan sobre el motivo de su pesar y la ninfa, incapaz de hablar, solo consigue explicarlo mediante ecos hablados que, a su vez, son repetidos por la MÚSICA. A partir de la segunda copla, NARCISO, también víctima del amor, se une a los lamentos de Eco. Cada cuatro ecos, se forma una copla perfectamente coherente que también es repetida por la MÚSICA.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

8

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Lamento
Texto de la canción:

¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!
[…]
¡Llorad, llorad su muerte!

Acotaciones:

  • Retíranse a un lado; y sale la NATURALEZA llorando, y todas las NINFAS y PASTORES, y MÚSICA triste.

Métrica: Verso suelto

Composición poética o musical aludida: No

Personajes:

  • Música [Músicos]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

En esta elegía, la NATURALEZA HUMANA se lamenta por la muerte de NARCISO-Cristo, y la MÚSICA repite, al final de cada estrofa, el mismo estribillo fúnebre. La función de los pasajes cantados es catártica, y nos encontramos en el paroxismo del auto sacramental.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

9

Acto: 0
Bailada: No
Funciones dramatico-musicales:
Tema de la canción: Devoto
Texto de la canción:

GRACIA y NATURALEZA HUMANA
¡Canta, lengua, del cuerpo glorioso
el alto misterio, que por precio digno
del mundo se nos dio, siendo fruto
real, generoso, del vientre más limpio!
Veneremos tan gran sacramento,
y al nuevo misterio cedan los antiguos,
supliendo de la fe los afectos
todos los defectos que hay en los sentidos.
¡Gloria, honra, bendición y alabanza,
grandeza y virtud al Padre y al Hijo
se dé; y al amor, que de ambos procede,
igual alabanza le demos rendidos!

Acotaciones:

  • Cantan.

Métrica: Cuartetas-Lira

Composición poética o musical aludida: No

Personajes:

  • 1 x Gracia [Pastora]
  • 1 x Naturaleza Humana [Pastora]

Instrumentos:

  • [Sin instrumentos]

Comentario:

El pasaje cantado por la GRACIA y la NATURALEZA HUMANA da clausura a El divino Narciso retomando las problemáticas expuestas en la primera canción —la idoneidad de la mitología para explicar el misterio de Cristo, y la legitimidad del género del auto sacramental en sí— y proporcionando, en cifra, algunas respuestas: 1) la propia acción dramática se deshace de la trama mitológica en favor de una trama evangélica, dejando demostrada así la falsedad de la primera y, 2) la legitimidad del teatro en la difusión de la religión es su dimensión afectiva, más cercana a la fe que a la razón.

Poetas:

  • Cruz, Juana Inés de la

Compositores:

  • Anónimo

Partitura:

    [Sin partitura]

Sinergias musicales:

Grabaciones:

  • [Sin grabaciones]

Dramaturgos relacionados con este título:
  • Cruz, Juana Inés de la
  • CRUZ, Juana Inés de la: "El divino Narciso", Obras completas, ed. Alfonso Méndez Plancarte, México, Fondo de Cultura Económica, 1955, vol. III, pp. 21-97.
  • STEIN, Louise K.: Songs of Mortals, Dialogues of the Gods. Music and theatre in seventeenth-century Spain, Oxford, Clarendon Press, 1993.
  • Libro de música de la Cofradía de Nuestra Señora de la Novena. Manuscrito Novena, Madrid, INAEM-Centro de Documentación de Música y Danza, 2010 [edición facsímil].
  • JOSA, Lola: Nuevo Íncipit de Poesía Española Musicada, Barcelona - Madrid, Digital CSIC, 2018.
  • CABALLERO, Carmelo: "El manuscrito Gayangos-Barbieri", Revista de Musicología, XII, 1 (1989), pp. 199-268.
  • JOSA, Lola: "Jácara con variedad de tonos. Relaciones entre tonos humanos y música teatral en el siglo XVII", Revista de Musicología, XXXII, 2 (2009), pp. 397-448.
  • QUEROL GAVALDÁ, Miguel: Teatro Musical de Calderón. Música barroca española, Barcelona, CSIC, 1981, vol. VI.
  • VV.AA.: Tonos a lo divino y a lo humano, ed. Rita Goldberg, Londres, Tamesis Books, 1981.
Investigadores que han trabajado en este registro:
  • Mariano Lambea
  • Adriana Beltrán del Río